domingo, 16 de noviembre de 2014

QUÉ ME PRESENTEN LA PERIODISTA REAL



Veo una niña que aspira un protagonismo dentro del Concurso Nacional de Belleza que se equivoca, pero comete ese error provocada por una periodista que peca por ser incluso más estúpida que la respuesta de la misma Señorita Huila, yo me pregunto: ¿Dónde está el realizador de esta nota tan mediocre?
Veo que hay un estigma que no tiene reversa, veo que somos una sociedad que gusta bastante de la fachada, decimos que los concursos de belleza no sirven para nada pero somos los primeros en enterarnos de todos los por menores del mismo.
Que la una es prima de la otra, que el novio de "jesusita" no aguantó y le terminó, que es que Raimundo no dejó que cantara el uno porque las niñas no son bandidas, ETC ETC... y entonces?
Traemos de aquí, ponemos allá y encima como periodistas le decimos a una candidata que juegue hula hula mientras responde preguntas de cultura general, llegó la hora de decir lo que siempre me provoca decir en esta época....
Qué irresponsable es el periodismo que busca vender un boom mediático a costa de arrastrar la capacidad intelectual de unas niñas que no son más que conejillas de indias, ustedes me dirán, es culpa de ellas también, yo les dijo, tienen la absoluta razón, porque para llamar la atención basta con mostrar sus pechos en una revista a nivel nacional o ir a un evento público masivo y pelar bastante el diente a ver si la cámara las poncha y un famoso las vuelve tweet.
Jugamos a ser muy cultos y respetados, pero resulta que somos los más cochinos, nos falta a todos, incluso a mi mis queridos "seres humanos" colombianos

martes, 4 de noviembre de 2014

LA VIDA ES UNA TORMENTA DE FOTOGRAFÍAS

Le dije lo que debía, sentí el fresco ese que se descarga cuando uno se saca el veneno del alma, después de eso floté y me monté en el carro, me demoré una hora más de lo común en llegar a casa, extrañamente ese taco que fue un infierno para muchos, era mi gloria, mi espacio, el tiempo indicado, cada pieza musical de Latina Estereo era la precisa, fue un deleite... Me pregunté por qué no había una cámara oculta disfrutando conmigo aquella tragicomedia instantánea.

Pensando en ese bonito sentir dije a mi mismo: "Qué hagan una fábrica de descargos, un número o una cabina a la que uno recurra para disparar desde adentro del ser", pero de inmediato se me ocurrió que tras de esas oportunidades hay momentos impactantes que simplemente pasan, esto los hace tan intangibles que pensar en industrializar la idea de sentirse vivo es algo que obedece realmente al plano de lo efímero. Y la piel es demasiado extensa como para obligarla solamente soñar.

Hago un 'stop and go' que me trae un pensamiento obligado: ella es un instante, un suceso de procesos que desbordan en un resultado. Estamos ahí en ese privilegio del ser, es decir, te estás sintiendo vivo, es allí cuando pasas de mirar a observar, es allí cuando ese detalle deja de ser un algo que estuvo de paso por tus retinas, es allí cuando la medicina intenta explicar esa orden que el cerebro lanza erizando cada poro de tu brazo dominante hasta llegar a la mano que conecta con el índice que presiona ese botón...

Mientras no exista la amiga que inmortaliza esos momentos, la cámara, la encargada de retener con la nostalgia venidera de los tiempos es la memoria. 

¡Y es allí donde obturas toda una vida!